La actriz Bárbara de Regil ha vuelto a estar en el centro de la atención mediática, esta vez no por un nuevo proyecto actoral, sino por su más reciente tratamiento estético: una técnica facial a base de esperma de salmón y exosomas. A través de sus redes sociales, la protagonista de Rosario Tijeras compartió el procedimiento que generó una ola de reacciones encontradas entre sus seguidores.
“Me voy a poner esperma de salmón y exosomas”, declaró De Regil en un video publicado en sus historias de Instagram y en TikTok, donde se le ve recostada en una clínica especializada, lista para recibir el tratamiento. Según la especialista que la atendió, se trata de una técnica no invasiva cuyo objetivo es revitalizar la piel, mejorar la hidratación y reducir los poros, sin recurrir a rellenos ni procedimientos quirúrgicos.
Sin embargo, la publicación no tardó en desatar la polémica. Mientras algunos usuarios aplaudieron su compromiso con el autocuidado y su apertura para probar nuevas tecnologías en estética, otros expresaron su escepticismo e incluso preocupación. Comentarios como “¿para qué lo hace si ya tiene una piel perfecta?” o “eso puede salir mal, qué miedo” contrastaron con mensajes que destacaban su valentía y su interés en alternativas naturales para estimular la producción de colágeno.
“No queremos envejecer”, confesó la actriz en medio de la controversia, dejando entrever que su motivación es mantenerse fresca y joven sin alterar sus rasgos con métodos invasivos. A pesar de las críticas, De Regil aclaró que el procedimiento fue realizado por profesionales, no implicó dolor y fue realizado únicamente con fines estéticos.
Este caso reabre el debate sobre hasta dónde está dispuesta a llegar la industria de la belleza y sus seguidores en la búsqueda de la juventud eterna. ¿Se trata de un avance científico o de una moda pasajera? Las opiniones siguen divididas, pero lo cierto es que, con cada publicación, Bárbara de Regil continúa posicionándose como una figura influyente —y polémica— en el mundo del bienestar y la estética.