Sobre las 2:30 de la tarde del pasado viernes 1 de septiembre del presente año, se presentó un tiroteo en la urbanización Castilla de la capital del Meta, en el hecho de sangre terminó muriendo Luis Fernando Ardila Rodríguez, un hombre de 39 años de edad, quien se desempeñaba como escolta de una comerciante del municipio de Puerto Gaitán.
De acuerdo con información extraoficial, el hecho ocurrió a las afueras de una panadería ubicada en límites del barrio Hierbabuena y Castilla de Villavicencio, momento en el cual, el afectado se encontraba en compañía de la mujer que presuntamente protegía. Al parecer, estas dos personas se disponían a comer o tomar algo en este lugar, cuando fueron sorprendidos por dos sujetos en moto.
Se presume que los sicarios llegaron hasta esta parte de la ciudad, con el fin de atentar contra la vida de la comerciante, por eso, el parrillero descendió del vehículo y sin mediar palabra, después de identificar a su víctima, desenfundó el arma de fuego en repetidas ocasiones. No se ha logrado establecer con seguridad, si el escolta se defendió de los disparos o si simplemente el gatillero accionó el elemento bélico indiscriminadamente.
Lo cierto es que, el hombre recibiría tres impactos de bala en su cuerpo, de los cuatro que, al parecer, tiró el asesino. De inmediato algunos testigos en medio del pánico, acudieron a auxiliar al herido, quien yacía en el suelo en estado crítico. Momentos después, una ambulancia hizo presencia en el sitio y subió de urgencia al sujeto al vehículo.
Debido a la gravedad de las heridas, los paramédicos decidieron trasladar a la víctima al centro asistencial más cercano, el cual, era el del centro de salud del barrio El Recreo. Allí llegaría el afectado en camilla, quien fue llevado a sala de cirugía para realizar todos los intentos por salvarle la vida. Sin embargo, minutos más tarde, los galenos confirmarían el deceso del escolta, el cual, no resistió las lesiones.




