Independiente Santa Fe y Atlético Nacional protagonizaron un empate sin goles en El Campín, en un duelo que prometía emociones por el peso de los nombres y la historia reciente de ambos clubes. Aunque no se rompió el cero, el encuentro dejó matices interesantes para el análisis, especialmente por parte del equipo cardenal, que afrontó su primer gran reto del semestre como vigente campeón del fútbol colombiano.
Santa Fe, dirigido por Jorge Bava, se plantó con solidez defensiva y una estructura táctica clara. Si bien no logró generar muchas opciones de gol, fue superior en intensidad y orden durante varios pasajes del partido. El actual monarca de la Liga BetPlay mostró que, pese a las variantes en su nómina, mantiene la esencia que lo llevó al título hace pocas semanas.
Tras el compromiso, el técnico uruguayo valoró el esfuerzo de sus dirigidos y dejó claro que el empate no era un mal resultado ante un rival de peso. “Santa Fe sabe lo que juega, es un equipo versátil, con carácter”, afirmó Bava, destacando la madurez colectiva que ha logrado construir en tan poco tiempo al frente del equipo bogotano.
Más allá del resultado, el encuentro sirvió para medir el nivel competitivo del campeón frente a un Nacional que atraviesa un momento inestable bajo el mando de Javier Gandolfi. Santa Fe, por su parte, mantuvo el invicto y demostró que no se conforma con lo logrado en el primer semestre, sino que apunta a consolidarse como protagonista también en este segundo torneo del año.
El empate deja al equipo cardenal con sensaciones positivas y una base sólida sobre la cual seguir construyendo. Con Jorge Bava al mando, Santa Fe sigue mostrando una idea clara, equilibrio táctico y confianza en su proyecto. En una liga tan cambiante, mantenerse firme y competitivo es tan valioso como una victoria, y ese parece ser hoy el sello del campeón.