Águilas Doradas vivió una amarga jornada en su estadio tras dejar escapar una victoria que parecía segura ante Junior de Barranquilla. El equipo antioqueño mostró autoridad durante gran parte del compromiso, pero no supo sostener la ventaja y terminó cediendo en un duelo que tuvo todos los ingredientes de un partido vibrante.
El conjunto dirigido por Pablo De Muner comenzó con determinación y logró ponerse arriba en el marcador con contundencia. Su propuesta ofensiva desbordó a Junior durante buena parte del primer tiempo, generando confianza en la tribuna local y presagiando una victoria clave en la Liga.
Sin embargo, el panorama cambió por completo en la segunda parte. Junior, con mayor solidez y mejor lectura del juego, fue empujando a su rival hacia su propio campo. La presión constante del visitante empezó a generar errores en la defensa de Águilas, que no pudo mantener la calma en momentos cruciales.
La remontada barranquillera se concretó con una dosis de jerarquía y carácter. El equipo costeño mostró una gran capacidad de reacción y aprovechó las grietas defensivas del rival para dar vuelta el marcador en los últimos tramos del encuentro.
Con esta derrota, Águilas Doradas deja escapar tres puntos importantes en casa y se replantea su rendimiento defensivo. Junior, en cambio, celebra una victoria con sabor a hazaña que refuerza su confianza y su camino en el campeonato.




