Balacera en Barranquilla terminó con un aficionado al fútbol muerto 

Juan Diego, dijo su padre, era una persona alegre, que le gustaba el vallenato y era aficionado al fútbol; además, cursaba el bachillerato y es el segundo, de tres hermanos, que muere trágicamente.
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La tarde de este domingo un crimen en plena calle de Barranquilla enlutó a otra familia costeña. Se trata de un joven, el menor de tres hermanos, que recibió un disparo en la espalda que le destrozó el corazón y lo dejó muerto en el acto.

La víctima fue identificada como Juan Diego Pérez De Moya, un muchacho residente en el barrio La Manga que en la noche del domingo de elecciones, salió con sus amigos a un barrio conocido como Ciudad Modesta, ubicado en el suroeste de la ciudad, donde terminó atrapado en una línea de fuego como resultado de una pelea callejera.

Juan Diego, que trabajaba en una empresa de alimentación, no tuvo tiempo de correr lo suficientemente rápido cuando un hombre, de aparente nacionalidad extranjera, disparó indiscriminadamente y lo hirió de muerte.

«Un amigo le dijo que corriera, que un hombre llevaba un revólver y fue entonces cuando le disparó a mi hijo por la espalda y le destrozó el corazón al igual que el mío con su muerte», dijo Juan Pérez Zuñiga, padre de la víctima.

Juan Diego, dijo su padre, era una persona alegre, que le gustaba el vallenato y era aficionado al fútbol; además, cursaba el bachillerato y es el segundo, de tres hermanos, que muere trágicamente.

«Mi hijo se estaba graduando y con el dinero que había ganado en el trabajo había pagado las pruebas del Icfes… La muerte de mi hijo me deja un dolor inmenso. Les pido a las autoridades que estén más atentas, que patrullen más las calles. Hay mucha inseguridad con nuestra gente y con los que han llegado», dijo el padre del joven, dijo el padre.


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