Brayan Escudero Manotas, de 12 años, era el nombre del adolescente que murió por asfixia en Riohacha.
El adolescente fue llevado a la clínica Cedes el miércoles 1 de diciembre, luego de que sus familiares lo encontraran colgado de un chinchorro, cuando jugaba en el patio de su casa.
Según las autoridades, el adolescente «presentaba una herida en la región frontal y murió por asfixia, información proporcionada por los médicos de guardia».
«Cuando la madre salió al patio vio a su hijo colgado del chinchorro todo morado, el joven fue bajado, trataron de reanimarlo, pero luego fue trasladado a un centro médico de la ciudad», reveló la fuente.
Miembros de la Policía de Infancia y Adolescencia y de la Sijín acudieron a la clínica Cedes para iniciar la respectiva investigación.
El adolescente actualmente cursaba el bachillerato en una institución educativa de la capital de La Guajira.
