El Atlético Bucaramanga podría enfrentar acciones legales por parte de la Dimayor debido a la protesta llevada a cabo por sus jugadores en el último partido de liga, donde salieron al campo con cintas en la boca mientras cantaban el himno, como muestra de apoyo a su técnico, Jorge Luis Pinto, tras la sanción impuesta por el organismo.
El gesto de los futbolistas, que causó revuelo en el fútbol colombiano, fue interpretado como una manifestación pública en contra de la decisión disciplinaria tomada por la Dimayor hacia su entrenador, quien fue sancionado tras los incidentes ocurridos en partidos previos. La protesta, aunque de carácter simbólico, no pasó desapercibida y generó un debate en torno al respeto a las normativas de la liga.
Fuentes cercanas a la Dimayor han indicado que el acto podría ser considerado una violación a las normas establecidas por el ente rector del fútbol colombiano, y que, como consecuencia, el club podría enfrentar una demanda o una sanción por parte de la entidad.
El Atlético Bucaramanga, por su parte, no ha emitido comentarios oficiales sobre las posibles consecuencias legales de la protesta, pero se espera que el club haga frente a cualquier medida que tome la Dimayor en los próximos días. Mientras tanto, la polémica continúa generando debate en el ámbito futbolístico.
