Atlético Bucaramanga dio un paso firme en la Copa Colombia al vencer 1-0 a América de Cali en condición de local, en un partido donde el equipo de Leonel Álvarez demostró disciplina táctica y eficacia en los momentos decisivos. Con este resultado, los leopardos se ilusionan con avanzar a la siguiente fase y confirman que su proceso bajo el mando del técnico antioqueño empieza a consolidarse.
Desde el inicio del encuentro, Bucaramanga mostró personalidad para disputarle el balón a un rival con jerarquía. La presión alta ordenada por Leonel Álvarez incomodó a la defensa escarlata, que se vio obligada a recurrir a despejes largos. La apuesta por cerrar espacios en la mitad del campo fue clave para controlar las sociedades ofensivas de América y mantener a salvo al guardameta local.
La anotación llegó como premio a la insistencia. Tras una transición rápida, Bucaramanga encontró el espacio para vulnerar la zaga visitante y marcar el 1-0 que definió el compromiso. El gol fue celebrado no solo por la plantilla, sino también por un público que llenó el estadio con la ilusión de ver a su equipo avanzar en el torneo. La efectividad fue la diferencia entre un Bucaramanga contundente y un América falto de claridad.
Leonel Álvarez, fiel a su estilo, apostó por un equipo solidario en la marca y agresivo en las segundas jugadas. Cada pelota dividida fue disputada con intensidad, reflejando el carácter que el entrenador busca imprimir. Jugadores como Faber Gil y Freddy Hinestroza destacaron en el ida y vuelta, aportando equilibrio en las bandas y apoyando tanto en defensa como en ataque.
El ingreso de variantes en el segundo tiempo fortaleció al conjunto local. Álvarez supo mover su banco con inteligencia, dándole oxígeno a un equipo que no se conformó con la ventaja y siguió buscando espacios para ampliar la diferencia. Aunque el marcador no se movió, la solidez defensiva y la disciplina táctica fueron argumentos suficientes para asegurar la victoria.
El triunfo ante un histórico como América tiene un valor especial para Bucaramanga. Más allá de los tres puntos, representa un golpe de autoridad y una señal clara de que el proceso de Leonel Álvarez comienza a dar frutos. El equipo se mostró competitivo, con identidad y con la convicción de que puede ser protagonista en la Copa Colombia.
Ahora, la serie se trasladará a Cali, donde Bucaramanga buscará confirmar su clasificación. Leonel Álvarez fue claro al señalar que aún no hay nada definido y que el grupo deberá mantener la misma concentración para enfrentar la revancha. Con el respaldo de una hinchada que sueña en grande, el conjunto auriverde se prepara para seguir escribiendo una historia ilusionante en el certamen nacional.




