La muerte Leider Romo nuevamente abre el interrogante sobre las amenazas de las que han sido víctimas funcionarios del Inpec, teniendo en cuenta que al inicio de este año varios integrantes del cuerpo de seguridad del sistema penitenciario fueron asesinados en Cartagena y Cúcuta, además de los ataques y hostigamientos a bala sufridos en ciudades como Medellín y Armenia. La víctima era natural de Tuquerres, Nariño y prestaba su servicio en la cárcel de Buga.
En su momento, esta situación obligó al teniente coronel Daniel Gutiérrez, director de la entidad, a realizar un pronunciamiento sobre los hechos que están rodeando los ataques sistemáticos de los que han venido siendo objeto los dragoneantes y guardianes, en su mensaje explicó que, todo parece indicar que, la violencia obedece a un proceso de transformación que atraviesa el Instituto y que busca minimizar los hechos delictivos que se realizan desde las cárceles por delincuentes que se encuentran purgando condenas.
El pasado mes de febrero, revivió la amenaza que alias ‘Pipe Tuluá’, considerado el cabecilla líder de la estructura delincuencial ‘La Inmaculada’, habría emitido desde el año 2017 cuando fue capturado, la cual se habría agravado después de la detención de su hermano ‘Nacho’.
Entre los nombres de guardianes y dragoneantes que han perdido de manera violenta en lo transcurrido de 2024 se encuentran: Jesús Cárdenas, asesinado en Cartagena y Carlos Andrés Sandoval, muerto en Cúcuta. A esta situación se suma, dos ataques violentos en contra de otros dos guardias en la ciudad Buga, Valle del Cauca, y entrega de panfletos amenazantes en diferentes sitios penitenciarios del país.
