En un trágico suceso en el barrio Picachito, en Medellín, las autoridades abatieron a un hombre que, según informes preliminares, agredió brutalmente a su hijastra de 13 años con un machete. El ataque se produjo en medio de un aparente episodio de alteración mental, presuntamente agravado por el consumo de sustancias psicoactivas. La madre del agresor detalló que su hijo había sido diagnosticado con esquizofrenia y tenía antecedentes de hospitalización psiquiátrica.

Los vecinos, alertados por los gritos de la niña, llamaron inmediatamente a las autoridades. Una patrulla de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá llegó al lugar y encontró al hombre, visiblemente alterado y armado con un machete, junto a la menor herida. El coronel Javier Mauricio Castellanos Ruíz, subcomandante de la Policía Metropolitana, relató que los uniformados intentaron controlar la situación y proteger a la adolescente. Sin embargo, al intentar intervenir, el hombre se lanzó contra los agentes, lo que los llevó a usar sus armas de dotación para neutralizar la amenaza y evitar más daños.
La niña fue trasladada de inmediato a un centro hospitalario, donde recibe atención médica y se recupera de las heridas sufridas en el rostro.
En declaraciones a Noticias Caracol, la madre del atacante lamentó el trágico desenlace y explicó que, en medio de la crisis, intentó calmar a su hijo. Relató que el agresor había sido hospitalizado en varias ocasiones debido a su diagnóstico de esquizofrenia y que en el momento del ataque se encontraba bajo los efectos de drogas.
«Le decía: ‘no diga esas cosas, deje a esa muchachita quieta, déjela vivir’, pero él estaba drogado y no escuchaba razones. Yo ya lo había llevado al hospital mental cuatro veces», expresó la mujer con evidente angustia.
Este caso pone en evidencia la necesidad urgente de fortalecer los mecanismos de atención en salud mental en el país. Las autoridades adelantan investigaciones para determinar las circunstancias exactas del hecho, mientras que organizaciones sociales y la comunidad han reiterado la importancia de implementar medidas preventivas y de apoyo para las personas con trastornos mentales, a fin de evitar situaciones similares en el futuro.
Este incidente ha generado un debate sobre el manejo de pacientes psiquiátricos en situación de vulnerabilidad, especialmente aquellos que también lidian con problemas de adicción.




