En la ciudad de Neiva, la intersección de la carrera 3 con calle 6 se convirtió en escenario de un grave incidente que dejó a Héctor Iván Caballero luchando por su vida. Según relatos de testigos y su esposa, todo comenzó cuando un conductor ignoró un semáforo en rojo, colisionando violentamente con la moto en la que viajaban.
Reacción desmedida
De acuerdo a la versión de la compañera sentimental del afectado, esta habría golpeado el capó del vehículo para llamar la atención del conductor sobre su imprudencia. En lugar de detenerse, el conductor enfurecido embistió nuevamente a la pareja, atrapando la pierna de la mujer entre la moto y su carro. Héctor, intentando proteger a su esposa, confrontó al conductor golpeando el vehículo con su casco.
La situación escaló rápidamente cuando la esposa del conductor, acompañada de un bebé de meses, instó a su esposo a actuar con mayor agresividad. En un acto de brutalidad, el conductor sacó una cruceta y golpeó a Héctor en la cabeza. El impacto fue devastador, provocando una fractura craneal con esquirlas que se incrustaron en su cerebro.
La Huida
Tras el violento ataque, el agresor se dio a la fuga, ignorando los intentos de la comunidad por detenerlo. A pesar de la denuncia presentada ante la Fiscalía, aún no se tienen pistas sobre su paradero, dejando a Héctor en estado crítico y su familia en angustia.
Este trágico incidente subraya los peligros de la intolerancia y la violencia en nuestras calles. La vida de Héctor Iván Caballero pende de un hilo debido a la ira descontrolada de otro individuo. Las autoridades deben actuar con urgencia para identificar y capturar al responsable, asegurando que no quede impune un acto tan violento y asegurando justicia para Héctor y su familia.
Tragedia
Los neivanos se encuentran consternados por este acto de violencia desmedida. La comunidad espera que este caso sirva como un llamado de atención sobre la importancia de la tolerancia y el respeto en las vías públicas. Mientras tanto, la familia de Héctor Iván Caballero espera ansiosa noticias sobre su recuperación, esperando que la justicia prevalezca en este difícil momento.
“Realmente hay que ser tolerantes independientemente que llevemos la vía o no, ya que no sabemos con quién nos topemos en el camino. Lo mejor es respirar hondo y seguir el camino para que el problema no ascienda a mayores como en este caso. Que Dios le dé pronta recuperación”, añadió un allegado.
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Pie de foto: Héctor Iván Caballero, agredido.
