El Deportes Tolima no logró sumar en su más reciente presentación y permanece con 23 puntos y una diferencia de gol de +6, lo que le costó descender del sexto al séptimo puesto en la tabla de posiciones. A pesar del traspié, el impacto fue menor del que pudo haber sido, ya que varios de sus competidores directos por un cupo a los cuadrangulares tampoco lograron imponerse en sus respectivos compromisos.
Aunque los resultados de la fecha no lo sacaron del grupo de los ocho mejores, el conjunto dirigido por Ismael Rescalvo se vio beneficiado por el empate del Atlético Bucaramanga ante Unión Magdalena (1-1) y la caída de Once Caldas frente al Medellín (2-0). De haberse impuesto estos clubes, la tabla habría sufrido movimientos que seguramente habrían comprometido más la posición del cuadro ibaguereño. Sin embargo, la paridad y las derrotas de los rivales mantuvieron al equipo tolimense dentro del lote de clasificación.
No obstante, el Deportivo Cali dio un paso importante al vencer 1-0 a Atlético Nacional, alcanzando también los 23 puntos. Aunque su diferencia de gol (+4) es inferior a la del Tolima (+6), dicho resultado le permitió a los ‘azucareros’ escalar posiciones y ubicarse también entre los ocho mejores. Este desenlace demuestra lo ajustada que está la competencia en la recta final de la fase regular.
Una luz de esperanza para el ‘Vinotinto y Oro’ es que cuenta con un partido pendiente, correspondiente a la fecha 13, en la que deberá visitar al Independiente Medellín. Este duelo no pudo jugarse en su momento debido al concierto de Shakira en el estadio Atanasio Girardot.
Hasta antes de esta derrota, el Tolima venía acumulando puntos importantes sin mostrar un fútbol arrollador, pero sí con cierta eficacia. Sin embargo, el tropiezo ante Fortaleza, que utilizó una nómina joven para imponerse, fue un llamado de atención para los de Ibagué. La necesidad de ajustar y corregir se hace evidente si desean mantenerse firmes en la lucha por alcanzar su clasificación número 33 a semifinales en torneos cortos.
El panorama, aunque aún manejable, se torna más exigente para un equipo que ha sabido mantenerse protagonista en los últimos años. Tolima deberá afrontar lo que viene con inteligencia y determinación, pues la competencia está cerrada y cada punto será vital en la definición. Un solo descuido podría costarle la permanencia en el grupo de privilegio y alejarlo de la posibilidad de pelear por el título del FPC 2025-I.
