La exconsejera presidencial para las regiones, Sandra Ortiz, quien actualmente está siendo investigada por uno de los más grandes casos de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), ha manifestado ante la Fiscalía los detalles de los acercamientos con el congresista Iván Name.
Ortiz se ha convertido en una figura clave dentro de una grave denuncia de corrupción que involucra al alto gobierno del presidente Gustavo Petro. En su proceso de colaboración con la Fiscalía, reveló detalles sobre una presunta estrategia corrupta liderada desde la Casa de Nariño para influir en decisiones del Congreso, específicamente en el Senado, bajo la presidencia de Name.
Según su testimonio, el Gobierno habría entregado sobornos millonarios a Name para garantizar la elección de Vladimir Fernández como magistrado de la Corte Constitucional y facilitar la aprobación de reformas en el Legislativo. Ortiz aseguró que el dinero provenía de la UNGRD, y que fue ella quien entregó dos pagos de 1.500 millones de pesos el 12 y 13 de octubre de 2023 en Bogotá.
Además, confesó haber organizado un desayuno clave en la oficina de Iván Name el 13 de octubre, en el que estuvieron presentes Fernández y Carlos Ramón González, entonces director del DAPRE. Ortiz solicitó un principio de oportunidad con inmunidad total por los delitos de tráfico de influencias y lavado de activos, a cambio de pruebas contra Name, González y Fernández. Sus chats de WhatsApp han revelado una trama de corrupción a nivel gubernamental.