Medellín, 23 de enero de 2025. La muerte de Zaida Andrea Sánchez Polanco, conocida como La Diabla, ha desatado nuevas líneas de investigación en torno a la masacre ocurrida en Aguachica, Cesar, que acabó con la vida de una familia de pastores. Según las autoridades, Sánchez Polanco podría haber sido el verdadero objetivo de los sicarios que el pasado 14 de enero asesinaron al pastor Marlon Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus dos hijos, Ángela y Santiago.
De acuerdo con fuentes de la investigación, La Diabla estuvo en el establecimiento comercial el día del crimen en Aguachica. Las indagaciones apuntan a que la mujer, quien tenía fuertes vínculos con el narcotraficante Alexander González Pérez, alias El Calvo —asesinado tres días antes de la masacre—, podría haber sido confundida con la familia Lora Rincón por los sicarios.
Sánchez Polanco, quien además de su relación con El Calvo era prestamista en la región, habría sido el blanco de un ajuste de cuentas, debido a sus conexiones con el narcotráfico. La teoría se refuerza al conocer que la familia Lora Rincón, víctimas fatales en Aguachica, podría haber sido un blanco accidental.
El asesinato de La Diabla ocurrió el pasado 21 de enero en Medellín, cuando fue atacada a tiros por un sicario a bordo de una motocicleta, frente a un hotel ubicado en el barrio Laureles. Ella se encontraba acompañada de su hijo de 9 años, con quien se hospedaba desde el 14 de enero. El atacante huyó del lugar, abandonando la motocicleta en la calle 64 con carrera 50, donde la Policía halló la motocicleta NKD, de placas FSI91B, y una chaqueta que se presume podría haber sido usada por el homicida.
Las autoridades han lanzado una recompensa de hasta 50 millones de pesos para quien brinde información que conduzca a la captura de los responsables. A su vez, los investigadores han logrado obtener retratos hablados de los dos sicarios involucrados en el asesinato de La Diabla, y continúan trabajando para esclarecer todos los detalles relacionados con su muerte y su posible vínculo con la tragedia ocurrida en Aguachica.
Este caso sigue bajo un intenso escrutinio y mantiene a la comunidad local en alerta, mientras se avanza en las pesquisas. La Policía y la Fiscalía están comprometidas en esclarecer el crimen y las posibles conexiones entre ambos hechos violentos que han sacudido la región.



