El asesinato del ibaguereño Jonathan Garibello Libarato y su amigo Daniel Stiven Uribe ha conmocionado a la comunidad, luego de que sus cuerpos fueran hallados en bolsas en la ciudad de Medellín. Ambos desaparecieron el pasado fin de semana en la capital antioqueña, donde trabajaban como conductores de taxi. A pesar de la desaparición, lo curioso del caso es que ninguno de sus vehículos fue saqueado, encontrando en su interior documentos, dinero y celulares averiados.
El cuerpo de Daniel Stiven, de 29 años, fue el primero en ser encontrado bajo un puente en el Centro de Medellín, envuelto en papel chicle y bolsas. Inicialmente, quedó como un cuerpo sin identificar, pero luego de los análisis forenses se confirmó que se trataba del joven taxista. En uno de los taxis se encontraron gotas de sangre, lo que refuerza la teoría de que los hombres fueron víctimas de un ataque violento.

El hallazgo del cuerpo de Jonathan Garibello fue realizado por sus propios familiares, quienes recibieron una llamada anónima informando sobre la ubicación del cadáver en la vía hacia San Pedro, cerca de una quebrada junto a la cárcel El Pedregal. Al acudir al lugar, los familiares identificaron el cuerpo por rasgos particulares y procedieron a notificar a las autoridades.
En lo que va del año, 26 personas han sido encontradas muertas en Medellín bajo esta modalidad, la cifra más alta registrada en los últimos cuatro años. Las autoridades continúan investigando este doble homicidio en un intento por esclarecer los hechos detrás de este trágico suceso.

