Con la presencia de más de 60 organizaciones rurales, se desarrolló en Ibagué una jornada sin precedentes: el ABC de la Contratación con el ICBF para el Campesinado. El objetivo fue claro: lograr que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar adquiera alimentos directamente a campesinos tolimenses para sus programas de nutrición.
La iniciativa, liderada por la representante Martha Alfonso, busca abrir una puerta real para que las economías populares participen activamente en las compras estatales. Se socializaron requisitos técnicos, jurídicos y financieros que permitirán a las asociaciones rurales ser proveedoras oficiales del Estado.
El evento contó con el respaldo de la Dirección de Abastecimiento del ICBF y la RAP-E Región Central, como parte de una estrategia que busca fortalecer la soberanía alimentaria, el desarrollo regional y la justicia social. “Este ejercicio apunta a que los campesinos le vendan directamente sus productos al Estado, dignificando su labor y mejorando la economía local”, expresó Julio Figueroa, asesor de Seguridad Alimentaria.
La jornada responde a una vieja deuda histórica del Estado con el campesinado. Gracias a la Ley 2046 de 2020, las entidades deben destinar al menos el 30% de sus compras a las economías populares, y en Tolima ya se están dando pasos firmes en esa dirección.
Martha Alfonso consolida así su liderazgo como una de las congresistas que más ha impulsado acciones concretas a favor del campo colombiano y las comunidades rurales del Tolima.




