La concejala de Cali por el Pacto Histórico, Ana Erazo, ha decidido no participar en la marcha programada por el presidente Gustavo Petro, debido a que se encuentra de vacaciones en Europa. Esta decisión ha generado un fuerte debate en las redes sociales y entre los ciudadanos, quienes cuestionan su compromiso con los movimientos sociales y la agenda política de su partido.
La ausencia de Erazo es particularmente notable, considerando que Cali fue la ciudad que otorgó la mayor cantidad de votos al Pacto Histórico en las últimas elecciones. Muchos habitantes de la capital vallecaucana esperaban que la concejala asumiera un papel protagónico en la movilización, defendiendo los intereses de su comunidad en un contexto donde las demandas sociales son cada vez más urgentes.
El descontento no se ha hecho esperar, con críticas que señalan una desconexión por parte de Erazo respecto a las expectativas de sus electores. Analistas políticos y opositores advierten que esta situación podría tener repercusiones negativas para su imagen y futuro político, especialmente en un momento en que la ciudadanía demanda un liderazgo más cercano y comprometido.
A medida que se acerca la fecha de la marcha, las expectativas sobre la participación de líderes locales como Ana Erazo son altas. La respuesta de la concejala ante los cuestionamientos sobre su ausencia aún está por definirse, mientras el clima de incertidumbre y expectativa crece entre sus seguidores y detractores.




