Olga B. González, representante a la Cámara por el Partido Liberal, lanzó una advertencia contundente: si el expresidente César Gaviria decide distanciar al partido de las luchas sociales que impulsa el Gobierno Petro, ella no dudará en abandonar la colectividad. “Si Gaviria se aparta de esas grandes convocatorias sociales, yo me tendré que ir del partido”, afirmó en una entrevista.
González, quien se define como una “liberal progresista”, criticó la decisión del Partido Liberal de declararse independiente de la coalición que respalda al Gobierno Petro. Para ella, esta postura va en contra de los principios de justicia social y equidad que, según afirma, han caracterizado al liberalismo. “Si el liberalismo abandona las causas sociales, las luchas que hemos tenido por tantos años por una justicia social, ambiental, por tener un país más equitativo, me tendré que retirar del Partido Liberal porque yo creo en ese liberalismo puro”, sostuvo.
La congresista también se refirió al hundimiento de la reforma laboral en el Congreso, responsabilizando a la oposición por no haber negociado los puntos álgidos de la iniciativa. “La oposición llevó al extremo al Gobierno al tener que buscar un mecanismo de participación distinto al Congreso para refrendar unas reformas que son necesarias”, dijo. González aseguró que el propósito de la reforma no era generar nuevos empleos, sino recuperar derechos laborales perdidos en 2002.
La representante también abordó las tensiones con el concejal Javier Mora y el diputado Carlos Reyes, quienes han mostrado un distanciamiento público. Aunque reconoció que las diferencias no son irreconciliables, advirtió que no tolerará indisciplina dentro del partido. “No vamos a permitir la indisciplina”, sentenció, dejando claro que no aceptará que sus compañeros respalden candidatos de otras colectividades.
Mientras el Partido Liberal se debate entre mantener su independencia o acercarse al Gobierno Petro, figuras como Olga B. González amenazan con abandonar la colectividad si no se alinean con las luchas sociales. El futuro del partido parece incierto, y las próximas semanas serán clave para definir su rumbo.