Recientemente, unidades de la Policía Nacional lograron la captura en flagrancia de Ángela Yomara Pérez Araque, conocida como alias “Xiomara”, de 27 años de edad, natural de Tunja y de ocupación recicladora. La mujer protagonizó un nuevo hecho de alteración del orden público al ingresar de manera violenta al establecimiento comercial “La Fondita de los Recuerdos”.
Según el reporte oficial, Pérez Araque irrumpió en el local con actitud agresiva, portando un objeto contundente con el que ocasionó daños materiales a un televisor marca Kalley de 32 pulgadas, cuyo valor fue estimado en $1.200.000. La rápida intervención de los uniformados permitió su aprehensión inmediata en el lugar de los hechos, evitando mayores afectaciones.
Este incidente no es un caso aislado. De acuerdo con información suministrada por las autoridades, alias Xiomara ha sido protagonista de múltiples actos delictivos en el centro de la ciudad. Hace pocos días, habría atacado a una patrullera de la institución, así como a un ciudadano con un arma blanca, situación que generó alarma entre residentes y comerciantes del sector.
Lo más preocupante del caso es el historial de reincidencia que presenta esta mujer. En los últimos días ha sido capturada al menos seis veces, y durante el año anterior, fue detenida en alrededor de 32 oportunidades, según cifras manejadas por la Policía. Este patrón de comportamiento delictivo ha encendido las alarmas tanto en la comunidad como entre los mismos agentes encargados de su captura.
El cuestionamiento recurrente gira en torno a la actuación del sistema judicial. Uniformados y ciudadanos manifiestan su desconcierto ante la facilidad con la que alias Xiomara regresa a las calles tras ser detenida, pese a representar un riesgo evidente para la convivencia y la seguridad. Muchos se preguntan si será necesario que ocurra una tragedia para que jueces y fiscales tomen medidas contundentes que impidan su liberación inmediata.




