Alias Óscar Barreto dejó de ser la mano derecha de Iván Mordisco para convertirse en su mayor amenaza. Este excabecilla del Frente Dagoberto Ramos fundó el Frente 57 Yair Bermúdez y rompió vínculos con el Estado Mayor Central, al que ahora combate abiertamente. Alias Barreto: el exaliado que ahora arrincona a Iván Mordisco.
En noviembre de 2023, Barreto oficializó la creación de su grupo armado, con presencia en municipios del Valle como Tuluá y Sevilla. Poco después, asesinó a alias Barbas, su antiguo compañero, y anunció la guerra contra Mordisco y Calarcá. Desde entonces, los combates entre estructuras disidentes han escalado, especialmente en Toribío, la zona donde ambos construyeron su poder criminal.
El Frente 57 gana terreno con sangre y plomo; Alias Barreto: el exaliado que ahora arrincona a Iván Mordisco
El pasado martes, Barreto dio un golpe certero al EMC: asesinó a alias Esteban Medina, principal lugarteniente de Mordisco en el Cauca. Este hecho marcó un punto de inflexión en la guerra interna de las disidencias.
Mordisco intentó frenar el avance de su exaliado movilizando tropas del Frente Jaime Martínez y Carlos Patiño, pero los esfuerzos no surtieron efecto. Barreto, con una estrategia militar agresiva y un ejército leal, comenzó a controlar corredores estratégicos y a desplazar a los mandos de Mordisco en el norte del Cauca.
El dominio que Mordisco sostuvo por años empieza a desmoronarse. Su estructura se muestra fracturada y vulnerable ante el avance del Frente 57.
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¿Quién es alias Barreto y por qué representa una amenaza real?
Luis Carlos Pinilla Cortés, alias Óscar Barreto, nació en Toribío en 1984. Ingresó a las Farc en 2012 y rápidamente ascendió en la jerarquía por su disciplina, capacidad de mando y violencia. Participó en estructuras como la Dagoberto Ramos, Jaime Martínez y el ELN, hasta convertirse en un líder con fuerte influencia en el suroccidente del país.
En 2017, las autoridades lo capturaron por extorsión, pero volvió a delinquir. Para 2020, ya comandaba la Compañía Adán Izquierdo y articulaba operaciones en múltiples municipios del Valle del Cauca y Nariño. Sus acciones incluyeron atentados con explosivos, reclutamiento forzado y control social en comunidades rurales.
Barreto no solo actúa como jefe militar. También cumple funciones políticas, organiza reuniones con líderes comunales y establece reglas en zonas sin presencia estatal. Esa doble capacidad lo convierte en un enemigo formidable para Mordisco y un actor clave en el conflicto armado actual.
