En un fenómeno inusual, el alcalde de Curumaní, Hermes Fernando Martínez, se ha convertido en tendencia en las redes sociales, no por sus acciones políticas, sino por la atención que ha captado su apariencia física. Cientos de mujeres, provenientes de diversos lugares del país, han expresado abiertamente su interés y admiración por el joven mandatario local, generando una oleada de comentarios que han llevado incluso a la propuesta de contratar un bus para visitar Curumaní en grupo.
A pesar de la efervescencia en torno a su apariencia, la atención sobre la carrera política de Martínez ha sido limitada. El alcalde, abogado de profesión con una especialización en gestión pública, inició su carrera política a la temprana edad de 20 años, siendo elegido concejal de Curumaní para el periodo 2012-2015. Su destacada actuación le valió el título de cabildante con el mayor número de votos en ese momento, y en el último año de su periodo, asumió la presidencia de la corporación.
La popularidad de Martínez en las redes sociales ha eclipsado, por el momento, sus logros políticos. Las fotos del alcalde se han viralizado, recibiendo elogios y comentarios entusiastas de parte de las usuarias. Aunque el tema ha sido abordado en tono jocoso, algunas voces críticas han cuestionado la «sexualización» del alcalde, señalando que, si la situación fuera inversa, con una alcaldesa en el centro de atención, se hubiera tratado con mayor seriedad.
El debate en línea ha puesto de relieve la dualidad de las reacciones, donde la admiración se mezcla con la crítica sobre la percepción de la imagen de un líder político. Mientras algunos celebran la libertad de expresión y la expresión positiva hacia el alcalde, otros instan a considerar la igualdad de género en el análisis de estas situaciones.
La peculiar situación ha generado no solo risas y comentarios humorísticos, sino también reflexiones sobre la manera en que la sociedad aborda la imagen de los líderes políticos, especialmente cuando se mezcla con elementos de atracción física. En medio de la coyuntura, Hermes Fernando Martínez, de 20 años, continúa siendo el centro de la atención virtual, suscitando debates sobre la percepción de la figura pública en la era de las redes sociales.
