El país enfrenta una brecha financiera preocupante, ya que millones de colombianos sin seguros de vida permanecen desprotegidos frente a emergencias que afectan sus ingresos.
Más de 23 millones sin protección ante imprevistos
Colombia registra más de 23 millones de personas sin ningún tipo de seguro de vida que cubra fallecimiento, invalidez u otros eventos que comprometen la estabilidad económica familiar. Esta situación refleja un bajo nivel de cultura aseguradora en el país.
Menos del 3% de la población ha optado por adquirir de manera consciente un seguro de vida individual. La cifra evidencia que la mayoría de los hogares sigue dependiendo únicamente de sus ingresos mensuales para enfrentar situaciones inesperadas.
Hogares sin reservas económicas
La directora del DANE, Piedad Urdinola Contreras, advirtió que gran parte de los hogares no cuenta con ahorros suficientes para responder a una disminución repentina de ingresos. El panorama financiero de las familias muestra una vulnerabilidad estructural.
Según el DANE, solo el 24,7% de los hogares podría afrontar un evento inesperado con recursos propios. Esa proporción incluye situaciones como la muerte de un integrante o una enfermedad incapacitante.
Endeudamiento y recortes en necesidades básicas
La falta de seguros de vida obliga a muchos colombianos a buscar alternativas que comprometen su calidad de vida. El 33,6% tendría que endeudarse para enfrentar una emergencia financiera.
Otro 24,5% recurriría a familiares o amigos para solicitar ayuda económica, lo que evidencia la dependencia de redes informales de apoyo.
Además, el 24,5% de los hogares reduciría gastos esenciales. Esta reducción incluye ajustes en alimentación, servicios básicos y otras necesidades que afectan el bienestar diario.
Un problema que exige acciones urgentes
El incremento de hogares en vulnerabilidad económica subraya la necesidad de fomentar la adquisición de seguros de vida. Los expertos señalan que esta herramienta financiera protege a las familias y evita caídas repentinas en su calidad de vida.
La realidad de millones de colombianos sin seguros de vida revela un desafío nacional que requiere educación financiera, incentivos y mayor acceso a productos de protección.
Hacia una cultura de prevención
Las aseguradoras y entidades públicas han insistido en promover una cultura preventiva para que más colombianos tomen decisiones informadas sobre su protección económica.
Sin embargo, la brecha entre quienes cuentan con un seguro y quienes no sigue siendo amplia. El reto está en lograr que más familias comprendan la importancia de prever situaciones que pueden cambiar su estabilidad de un día para otro.
La ausencia de seguros de vida continúa exponiendo a millones de personas a crisis económicas severas. El país deberá avanzar en soluciones que permitan reducir esta vulnerabilidad creciente.




