Dos disparos en la espalda causaron la instantánea muerte de Ricardo
El miércoles 9 de abril, a la 1:05 de la tarde, se registró un asesinato que volvió a estremecer al barrio La Estanzuela, en la localidad de Los Mártires. La víctima fue Ricardo Montalvo Contreras, más conocido en el sector como “Ricamente”, quien fue atacado a sangre fría por dos sicarios que se movilizaban en motocicleta. El hecho, captado por cámaras de seguridad, evidencia la violencia con la que operan redes criminales en esta zona del centro de Bogotá.
Ataque directo
En las imágenes se puede observar cómo Montalvo caminaba por una de las calles del barrio, aparentemente sin notar que estaba siendo seguido. Uno de los agresores, vestido con un buzo negro y capota, descendió del vehículo, lo persiguió por unos metros y le disparó por la espalda en al menos dos ocasiones. El ataque fue directo y fulminante: la víctima cayó de inmediato, sin posibilidad de defensa.
El sicario huyó rápidamente en la moto junto a su cómplice, mientras algunos testigos buscaban resguardarse o comunicarse con las autoridades. La escena del crimen fue acordonada minutos después por la Policía, que inició la inspección del cuerpo y la recolección de evidencia.
Investigación
De acuerdo con el primer reporte de la Policía de Los Mártires, este asesinato estaría vinculado con un ajuste de cuentas relacionado con el microtráfico en el sector. Ricardo Montalvo, según las autoridades, tenía antecedentes y posibles nexos con redes de venta de estupefacientes, lo que lo habría puesto en la mira de estructuras rivales.
Este hecho se suma a una preocupante serie de homicidios registrados en La Estanzuela, una zona golpeada por disputas territoriales, presencia de ollas de droga y delincuencia común. Los residentes, cansados de vivir con miedo, han reiterado sus llamados al Distrito para que se tomen medidas urgentes de seguridad.
Mientras avanza la investigación y se analizan los videos de cámaras del sector, las autoridades ofrecieron recompensas por información que permita ubicar a los responsables del crimen. Entre tanto, la comunidad exige operativos permanentes, mayor pie de fuerza y estrategias reales para recuperar la tranquilidad perdida.
