La muerte tocó la puerta de la casa de doña Virginia Ortiz Molano y extrañas circunstancias se la llevó. La anciana fue hallada sin vida por residentes de la zona, que empezaron a sospechar que a la humilde viejita le había pasado algo. Dicen que, posiblemente, la señora falleció de alguna caída que sufrió dentro de su vivienda. Sin embargo, no se descartan otras hipótesis. Pese a que, todos en el barrio La Resurrección de la localidad de Rafael Uribe Uribe, conocían a la anciana, a la hora de su deceso nadie, ni siquiera un familiar, ha ido a reclamar su cadáver para darle cristiana sepultura.
Hasta ayer, en horas de la mañana los residentes del barrio La Resurrección, estaban haciendo todo lo posible por hallar un familiar de doña Virginia. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición, ningún ser querido de la anciana había sido contactado para que reclamara su cadáver y le diera cristiana sepultura. La muerte de la señora se convirtió en todo un enigma y más la ubicación de algún familiar. Al parecer, la mujer vivía sola desde hacía varios meses. Dicen que la anciana salía todas las mañanas a caminar, pero este 22 de noviembre ningún vecino la miró salir de su vivienda, por lo que pensaron que algo le había sucedido.
Le puede interesar: Ladrón fue asesinado con el mismo cuchillo que atracaba en Bogotá
Quienes residían cerca de la residencia de la anciana le narraron a EXTRA BOGOTÁ cómo sucedieron los hechos “Este martes todos los vecinos empezamos a sospechar que algo le había pasado a doña Virginia, porque ella siempre salía por la mañana a caminar. Entonces, golpeamos en la casa y al ver que nadie habría pensamos lo peor. Efectivamente, la anciana estaba muerta. Después que hicieron el levantamiento del cadáver, las autoridades nos informaron que nadie ha reclamado el cuerpo de la señora” aseguró una vecina de doña Virginia.
Le puede interesar: Hombre fue asesinado por robarle la motocicleta en Bogotá
Al lugar de los hechos llegaron miembros del Cuerpo Técnico de Investigación, quienes hicieron el levantamiento del cadáver, el cual reposa en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal, a la espera que un ser querido reclame el cadáver, para darle cristiana sepultura. Hasta ayer en horas de la mañana nadie había reclamado el cuerpo de la anciana. Pese a que, la anciana era muy querida en el sector ningún vecino quiere reclamar el cuerpo de la mujer, para no incurrir en gastos funerarios.




