El 10 de mayo de 2025, India y Pakistán firmaron un acuerdo de alto el fuego tras una serie de enfrentamientos que comenzaron el 23 de abril. El conflicto se desató después de un ataque en Pahalgam que dejó 27 muertos, incluyendo turistas hindúes y musulmanes locales.
Aunque el acuerdo fue recibido con alivio internacional, ambos países han acusado al otro de violar el alto el fuego en varias ocasiones. En Jammu y Cachemira, se reportaron explosiones y disparos poco después de la implementación del acuerdo, lo que ha generado preocupación sobre su durabilidad.
Las tensiones entre India y Pakistán han sido históricas, y este acuerdo representa un paso importante hacia la desescalada, aunque persisten desafíos significativos para lograr una paz duradera en la región.
