Primer cara a cara. Hoy, 7 de mayo, es un día muy esperado y especialmente para el expresidente de los EEUU, Donald Trump, 77 años, quién por primera vez escuchará lo que tiene que decir la exactriz de cine porno, Stormy Daniels, a quién al parecer le habría pagado por su silencio.
La actriz, cuyo nombre real es Stephanie Clifford, recibió 130,000 dólares en la recta final de la campaña electoral de 2016, que el magnate ganó frente a Hillary Clinton.
El testimonio de la actriz llegaría después de que el juez, Juan Merchán, y quién supervisa el juicio penal contra Trump, amenazó con encarcelar al expresidente por sus continuas violaciones de la orden de silencio.
Hasta ahora, la única imagen de los dos juntos era una foto sacada en ese mismo 2006 en un torneo de golf que publicó la actriz, cuyo nombre real es Stephanie Clifford.
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Stormy Daniels: Tuve relaciones sexuales sin condón
La testigo contó cómo conoció a Trump en un torneo de golf cuando tenía 27 años y mientras el magnate niega cualquier relación con la actriz.
«Sabía que era mayor, probablemente mayor que mi padre»
Agregó Daniels que «Trump quería cenar conmigo» y cuando llegó era la la suite del hotel, «tres veces más grande que mi apartamento»
El expresidente la esperaba con flores y en pijama de seda que después cambió por una camisa y un pantalón de calle.
Según Daniels, hablaron durante unas dos horas de diversos temas, como cuántas veces Daniels se tenía que hacer pruebas para ver si tenía enfermedades sexuales en su trabajo como actriz, y de la posibilidad de que ella apareciese en el programa de televisión de Trump.
«Él le confesó que no dormía en la misma habitación que su esposa, Melania».
En un momento de la conversación, Daniels se cansó de que Trump fuese tan «arrogante y pomposo» en sus respuestas y le amenazó con azotarle con una revista -en la que el magnate salía en la portada- en el trasero, lo cual terminó haciendo.
Daniels dijo que pese a que no fue drogada ni tomó alcohol, no podía recordar «cómo terminó ahí», pero sí que practicó sexo sin preservativo con Trump.
«Nunca dije ‘no’ porque nunca dije nada», recordó la actriz.
Se volvieron a ver en varias ocasiones y que en una de ellas el magnate intentó volver a tener relaciones, pero no pasó nada porque dijo que estaba con el periodo.
De ser declarado culpable, podría ser condenado a la cárcel, aunque ello no impedirá que asuma la presidencia del país si gana en noviembre a su actual rival, el presidente Joe Biden.
De qué lo acusan a Trump
El pago se hizo pasar como gastos legales de Michael Cohen, entonces abogado de Trump, para ocultar una relación que habrían mantenido diez años antes, que el exmandatario siempre ha negado.
El actual candidato republicano y rival de Joe Biden quién espera regresar como presidente a la Casa Blanca en las elecciones de noviembre se verá forzado a presenciar la declaración de esta testigo clave que ha sido la causa del juicio al magnate.
«Está acusado de 34 falsificaciones de documentos contables para disfrazar el pago»
Según el portal de noticias El Heraldo «El pago en sí no es ilegal, pero está en causa la manera en que se hizo ya que fue Cohen quien puso de su bolsillo el dinero y después el magnate se lo devolvió haciéndolo pasar como gastos legales de su empresa familiar Trump Organization».
El lunes, los fiscales interrogaron a Jeffrey McConney, un ejecutivo de la Organización Trump que explicó al jurado sobre dichos reembolsos.

Además de Daniels, de 45 años, se espera que Cohen, actual enemigo jurado de Trump, también suba al estrado de los testigos de la fiscalía, que la víspera anunció que prevé dos semanas más para concluir sus interrogatorios.
Desde el 15 de abril, el magnate republicano, que denuncia ser víctima de una “caza de brujas”, se sienta en la destartalada sala del Tribunal Supremo de Manhattan donde los testigos han arrojado luz sobre las bambalinas de su campaña electoral de 2016 frente al jurado popular que sellará su suerte.
De ser declarado culpable, podría ser condenado a la cárcel, aunque ello no impedirá que asuma la presidencia del país si gana en noviembre a su actual rival, el presidente Joe Biden, a quien culpa de estar sentado en el tribunal de Manhattan en lugar de haciendo campaña.



