Red de Veedurías cuestiona decisiones en Tribunal Administrativo del Huila
La Red de Veedurías de Colombia anunció la promoción de acciones legales de orden disciplinario y, eventualmente, penal contra el magistrado del Tribunal Administrativo del Huila, José Miller Lugo Barreto. Según la organización, el magistrado habría incurrido en irregularidades al posesionar de manera excepcional al alcalde de Neiva, Germán Casagua Bonilla, en un acto que incluyó un gesto de cercanía personal inusual, generando dudas sobre su imparcialidad.

Plan de desarrollo
Uno de los principales puntos señalados es la decisión del magistrado Lugo Barreto de aprobar un componente del plan de desarrollo del alcalde Casagua Bonilla, pese a que este carecía del obligatorio componente de paz, un requisito fundamental establecido por la normativa. La Red de Veedurías subrayó que, en otros casos similares, el magistrado había declarado la ilegalidad de planes de desarrollo que no cumplían con este mismo requisito, lo que plantea una aparente inconsistencia en sus fallos.
Alegaciones
La relación entre el magistrado y el alcalde ha sido objeto de escrutinio debido al respaldo otorgado en decisiones judiciales que, según la Red, favorecen significativamente al mandatario. Este vínculo genera preocupación sobre la transparencia y la equidad en los procesos judiciales relacionados con la administración municipal de Neiva. Los líderes de la Red señalaron que el abrazo que selló la posesión del alcalde fue un gesto que excedió los protocolos formales, lo que podría interpretarse como un indicio de parcialidad.
Acciones legales
Ante esta situación, la Red de Veedurías trabaja en la recopilación de pruebas para sustentar las denuncias ante los órganos de control disciplinario y penal. “Estas acciones no buscan otra cosa que garantizar la rectitud en la administración de justicia y evitar que intereses personales o políticos interfieran en las decisiones de los tribunales”, afirmó un representante de la organización.
Implicaciones
Las decisiones tomadas por el magistrado Lugo Barreto no solo han generado polémica en el ámbito judicial, sino que también han impactado la percepción de la gobernabilidad en Neiva. La aprobación del plan de desarrollo, con sus falencias evidentes, ha despertado críticas entre sectores ciudadanos que cuestionan la efectividad de las políticas implementadas y los beneficios reales para la comunidad.
A la transparencia
La situación plantea la necesidad de reforzar los mecanismos de vigilancia y control sobre los órganos judiciales, particularmente en casos que involucran a funcionarios públicos de alto rango. La Red de Veedurías concluyó su pronunciamiento haciendo un llamado a las autoridades correspondientes para garantizar que las decisiones judiciales se mantengan dentro de los límites de la legalidad y la imparcialidad, pilares fundamentales de la democracia y la justicia.
El proceso bajo la lupa
Este caso será un punto de inflexión en el debate sobre la independencia de los jueces y su papel en las dinámicas políticas locales. La expectativa de la ciudadanía y de los actores involucrados es que el caso avance con celeridad, claridad y sin influencias externas.




