Un residente de la ciudad se encontró con una desagradable sorpresa después de realizar sus compras en un supermercado del barrio el Galán. Dejo su automóvil estacionado frente al establecimiento y al salir del lugar se dio cuenta que los espejos retrovisores de su vehículo habían sido arrancados.
El robo tuvo lugar en las horas de la tarde cuando Héctor Romero, estacionó su automóvil en una bahía de estacionamiento que había en el lugar para ingresar a realizar sus compras. Sin embargo, al regresar después de aproximadamente media hora, encontró su vehículo despojado de sus espejos retrovisores.
Testigos en la escena relataron que no se percataron de ningún comportamiento sospechoso alrededor del vehículo durante el tiempo que el propietario estuvo ausente. Este hecho ha suscitado preocupación entre los residentes locales, quienes ahora se preguntan si la zona está experimentando un aumento en los actos de vandalismo o si este caso es un hecho aislado.
El propietario afectado expresó su frustración y preocupación por el hecho, señalando que esto no solo representa una pérdida financiera, sino que también genera inseguridad en la comunidad. «Es lamentable que no podamos dejar nuestros vehículos estacionados sin preocuparnos por actos de vandalismo», comentó Héctor Romero.
Las autoridades locales han sido notificadas del hecho, y la Policía está llevando a cabo una investigación para determinar si se trata de un caso individual o si existe un patrón emergente de vandalismo en la zona.
