La Comuna 18 de la capital del Valle del Cauca está sumida en el dolor y la tristeza por la trágica y violenta muerte de Mauricio Alegría Lucumí, conocido cariñosamente como ‘Pipo’. Su fallecimiento ha causado un profundo impacto, no solo entre los habitantes del barrio Los Chorros, sino en toda la ciudad, donde era un reconocido entrenador de fútbol y un líder social comprometido con su comunidad.
Caso
Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, cuando vecinos que residen cerca del río Meléndez, a la altura de la Calle 16 con Carrera 80, descubrieron un cuerpo flotando en el afluente. Según los primeros reportes, los moradores quedaron atónitos al ver la escena y de inmediato dieron aviso a las autoridades. La Policía llegó al lugar acompañada por unidades del Cuerpo Técnico de Investigación CTI de la Fiscalía, quienes realizaron la inspección técnica al cadáver. Durante el procedimiento, se constató que el cuerpo presentaba once heridas causadas con arma blanca, ocho en la espalda, una en el tórax y otra en el glúteo derecho. Las autoridades presumen que el joven fue atacado brutalmente y posteriormente arrojado al río, aunque aún no se tiene una hipótesis clara sobre los autores o el motivo del crimen.
Vida
Mauricio Alegría, era un referente de esperanza y transformación en su comunidad. A través del fútbol, dedicó su vida a formar no solo deportistas, sino personas con valores y capacidades de liderazgo. En el barrio Los Chorros, decenas de niños y jóvenes encontraban en él no solo a un entrenador, sino a un amigo y un mentor. Su trabajo trascendía lo deportivo, pues también inculcaba principios de respeto, convivencia y resolución pacífica de conflictos. Gracias a su dedicación, muchos jóvenes lograron alejarse de las calles y encontrar en el deporte una herramienta para construir un futuro mejor. “Pipo era de esos muchachos que uno dice: vale la pena. Siempre tenía una sonrisa para todos, sin importar lo que estuviera pasando. Se preocupaba mucho por los niños y por ayudarlos a que no se dejaran llevar por malos caminos”, expresó uno de los vecinos que lo conoció y compartió con él en diferentes actividades comunitarias.
Dolor
La trágica muerte de Alegría Lucumí ha generado una ola de consternación y múltiples manifestaciones de solidaridad. Sus amigos, vecinos y familiares se han unido para exigir justicia y para que este crimen no quede impune.

