Charles Ninson Valenzuela Zapata fue asesinado en Ecuador en un aparente intento de hurto.
Una familia de Neiva atraviesa por una dolorosa situación luego de que su ser querido, Charles Ninson Valenzuela Zapata, de apenas 23 años, falleciera en el vecino país del Ecuador tras ser víctima de un violento atraco.
El joven, que llevaba seis meses trabajando en la ciudad de Machala, fue atacado a bala por delincuentes armados, lo que desencadenó una cadena de dificultades médicas y económicas que finalmente acabaron con su vida.
El ataque
De acuerdo con lo narrado por sus familiares, Ninson se encontraba cumpliendo con sus labores diarias cuando fue abordado por dos hombres armados que intentaron despojarlo de sus pertenencias. En medio del asalto, los delincuentes le dispararon en la garganta, dejándolo gravemente herido.
Un ciudadano lo auxilió y lo trasladó de inmediato a un hospital público de Machala, pero allí, según denuncia su familia, no recibió la atención adecuada porque no había un cirujano disponible. Ante la urgencia, su hermano y allegados gestionaron su traslado a una clínica privada, donde la atención médica dependía del pago inmediato de altas sumas de dinero.
Una lucha contra reloj
La familia Valenzuela Soto relata que desde ese momento comenzó una carrera desesperada por salvar la vida de Ninson. Los médicos exigían sumas que oscilaban entre cuatro mil y cinco mil dólares para realizar procedimientos urgentes. Sus empleadores en Ecuador colaboraron con parte de los gastos, pero la mayor carga económica recayó en sus familiares en Colombia.
“Nos tocó endeudarnos por todas partes, pedir prestado, reunir como fuera para poder enviar el dinero. Pagamos algunas cirugías, pero cada día era más plata para medicamentos, exámenes o procedimientos. Hubo un momento en que nos pedían 600 dólares para un examen y, como no los teníamos, no se lo hicieron”, contó entre lágrimas Yolanda Soto, hermana de la víctima.
A pesar de los esfuerzos, la falta de continuidad en los tratamientos, el alto costo de los medicamentos y la precaria situación económica de la familia terminaron por complicar su estado de salud. Tras varios días en cuidados intensivos, Ninson falleció, dejando a su esposa y a un hijo pequeño.
Los agresores fueron capturados
Según informaron las autoridades ecuatorianas, los responsables del ataque fueron capturados poco después de cometer el crimen, gracias a la reacción de la Policía que los persiguió y logró detenerlos. Uno de los detenidos sería de nacionalidad ecuatoriana y el otro, venezolano.
Sin embargo, esta acción no alivia el dolor de los familiares, quienes hoy deben enfrentar el difícil reto de repatriar el cuerpo del joven hacia Neiva, en medio de deudas que ascienden a cerca de 40 millones de pesos.
Llamado a la solidaridad
La madre del joven, una mujer de 53 años, vendedora ambulante, diabética e hipertensa, viajó a Ecuador para acompañar a su hijo en sus últimos días y hoy se encuentra devastada por la pérdida. La familia hace un llamado urgente a la solidaridad de la comunidad huilense y de todos aquellos que puedan aportar económicamente para cubrir los gastos de traslado del cuerpo y las deudas médicas.




