El municipio de Santa María, en el departamento del Huila, se está viviendo todo un ‘viacrucis’. Campesinos de los diferentes sectores económicos alegan que no tienen oportunidad de sacar ni comercializar sus productos por la falta de vías. Funcionarios de esa administración hicieron un llamado al Gobierno Nacional para que brinde soluciones urgentes, pues las 42 veredas que tiene el municipio, todas se encuentran incomunicadas por la crisis vial que se agravó por las fuertes lluvias.
Julio Peralta, del gobierno municipal, se mostró preocupado y se refirió a la crisis que afronta el municipio por cuenta del invierno, que ha generado pérdida de la banca en varias veredas, puentes afectados, deslizamientos, fincas y cultivos afectados.
“Tenemos seis puentes que colapsaron y están en alto riesgo para la comunidad; también hay más de 20 puentes peatonales que el río se los ha llevado. La situación no es nada fácil, la vía para llegar a la ciudad de Neiva está colapsada, hay sitios críticos que no han sido atendidos por la Administración”, explicó.
Asimismo, indicó que una creciente ocurrida el pasado martes arrastró con la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, afectando a miles de familia. En temas económicos, dijo que la cosecha cafetera empezará pronto pero que las fuertes lluvias podrían hacer caer en crisis a los caficultores de esa zona del departamento del Huila.
“No contamos con los recursos, nos sentimos aislados, solos. Queremos que el gobierno nacional y el presidente de la República nos ayude a solucionar toda esta situación”, manifestó.




