El periódico keniano «The Star» informó en la mañana del domingo 5 de diciembre de la muerte de al menos 24 personas después de que el autobús en el que viajaban cayera a un cauce del río Enziu, situado en el condado de Mwingi, en el centro de Kenia.
En el trágico accidente, en el que fueron rescatadas otras doce personas, entre ellas cuatro menores y ocho adultos, murieron 15 miembros de una misma familia que viajaban en el autobús para asistir a una boda en Nuu-Mwingi.
La gobernadora de la provincia de Kitui, Charity Ngilu, expresó su solidaridad con las familias de las víctimas y explicó que las labores de rescate se reanudarán el domingo por la mañana, tras haberse suspendido al anochecer. Un equipo de buzos de la Marina keniana ya se encuentra en el lugar.
Se espera que el número final de víctimas mortales aumente en las próximas horas, ya que se cree que todavía hay cuerpos atrapados en el interior del vehículo. Se desconoce el número exacto de pasajeros, pero el autobús tenía 54 plazas.
Según un vídeo publicado en las redes sociales, el conductor del autobús intentó vadear un puente parcialmente inundado, pero la corriente acabó arrastrando el vehículo. Algunos de los pasajeros consiguieron salir por las ventanas y nadar hasta ponerse a salvo.

