En varios estados de Estados Unidos, entre ellos Florida, Texas, Carolina del Norte y Virginia, se han retirado o puesto bajo revisión tres novelas del Nobel colombiano Gabriel García Márquez: Cien años de soledad, El amor en los tiempos del cólera y Crónica de una muerte anunciada. La medida responde a una nueva normativa estatal que permite a padres y juntas escolares cuestionar y prohibir libros en bibliotecas de centros educativos, argumentando que contienen escenas de violencia, sexualidad o relaciones que consideran inapropiadas para menores.
De acuerdo con el informe de la organización PEN America, en el periodo escolar 2024-2025 se registraron unos 6.870 casos de libros vetados o restringidos en 23 estados y 87 distritos escolares, abarcando casi 4.000 títulos únicos. Las obras de García Márquez figuran entre los autores latinoamericanos más afectados por esta ola de vetos.
Mientras que los promotores de la medida aseguran estar protegiendo a los estudiantes y asegurando que las lecturas sean “aptas para su edad”, críticos y organizaciones de defensa de la alfabetización cultural advierten que la decisión representa un retroceso para la libertad de lectura y el acceso a la literatura universal.
Para muchas comunidades hispanoamericanas en EE.UU., la retirada de estas obras representa también una pérdida simbólica: la exclusión de una voz clave de la literatura latinoamericana del currículo escolar podría afectar la visibilidad de la lengua, la cultura y la identidad de miles de estudiantes de origen latino.




